“Faggots”: un tradicional plato de albóndigas británico

Durante nuestro último viaje a Inglaterra descubrimos los “Faggots”. A pesar de haber viajado con frecuencia a Inglaterra los últimos 40 años de mi vida, no los conocía, y mucho menos los había probado.

En la cocina británica, un “Faggot” (traducido al español como “maricón”, con perdón) es, simplemente, una  albóndiga. En esencia, los “faggots” son una comida británica, parece que pasada de moda y  caída en el olvido en los últimos años, que están viviendo actualmente un renacimiento. En Birmingham, y en el área alrededor de los Midlands, que se considera el hogar de los “faggots”, siempre ha sido una comida muy popular). Con su reactivación, ahora se comen en todo el Reino Unido.

Según me contaron en el Pub donde los comimos, los “faggots”  surgieron como un plato de subsistencia que utilizaría varias partes del animal, tradicionalmente cerdo, incluyendo las vísceras. Se comía principalmente en el oeste de Inglaterra y era un plato  barato para la gente del campo. El primer registro del plato que se conserva es de 1851. La popularidad de los “faggots” creció durante el racionamiento de alimentos en la Segunda Guerra Mundial.

¿Cómo se preparan los “faggots”?

Tradicionalmente, los “faggots” están hechos de despojos, generalmente carne de cerdo, y de los trozos del animal que generalmente se descartan (el corazón y el hígado), lo que hace que  sea un plato barato y nutritivo. Las carnes se mezclan con una selección de especias y hierbas, pimienta y perejil, y algunas veces migas de pan (esto depende de la parte de Gran Bretaña de donde provienen) y cebolla. Con esta mezcla de carne se hacen bolas grandes. Se cocinan como habitualmente cocinaríamos las albóndigas, pero los fagots necesitan un tiempo de cocción más largo, simplemente debido a los despojos.

La forma tradicional de servir los fagots es con guisantes, por lo general guisantes blandos, a menudo acompañados de un puré de patatas cremoso y salsa gravy.

Faggots

• Dificultad: fácil
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Ingredientes

• 100 gramos de manteca de cerdo
• 100 gramos  de hígado de cerdo picado
• 100 gramos de corazón de cerdo picado (opcional)
• 250 gramos de carne de cerdo toscamente picada
• 100 gramos de  tocino  
• 100 gramos de miga  de pan  
• 1 cebolla mediana picada
• 1 cucharadita de pimienta
• 2 cucharadas de perejil picado
• 2 hojas de salvia picadas (opcional)
• 1 cucharadita de tomillo
• sal
• 8 o 10 tiras de panceta para enrollar los faggots
• salsa Gravy ya preparada

Preparación

Precalentad el horno a 170ºC

1. En una sartén a fuego medio, derretid un poco de la manteca de cerdo añadid la cebolla. Cocinad durante 10 minutos  hasta que esté muy suave.
2. En un bol, combinad todos los demás ingredientes y agregad la cebolla. Mezclad con las manos hasta que esté todo muy bien integrado.
3. Freíd un poco esta mezcla cruda hasta que la carne no se vea rosada. Poner sal al gusto. 
4. Mojaos las manos con agua fría y haced porciones de esa mezcla para hacer las bolas. Os saldrán unas 8 o 10 dependiendo del tamaño. Envolved cada faggot con una tira de panceta  asegurándoos que queden sellados por la panceta.
5. Colocad los faggots sobre una bandeja de horno sobre una hoja de papel de hornear. Hornead durante 50 0 6o minutos.  Sacadlos de horno y servid inmediatamente con salsa gravy  que podéis encontrar ya preparada en el supermercado (Bote Salsa Para Carne Granulado Bisto: Carrefour, Mercadona, Amazón…)

Web: Commememucho

La salsa gravy es una salsa que se hace con el jugo de la carne cocida con muchas especias, cebolla, etc y maicena. La venden deshidratada. Te enriquece cualquier guiso que prepares en casa. En este plato la ponéis sobre las faggots  y le da un sabor extraordinario ¡Os encantará!