Icono del sitio COMMEMEMUCHO

Cómo preparar la Salsa Pesto casera

Cómo preparar la Salsa Pesto casera 1

La salsa pesto es originaria de Génova.  Junto a otras salsas también muy populares, como la carbonara o la boloñesa, es una de las salsas más famosas de la cocina italiana. Se prepara con  albahaca, ajo, piñones, queso parmesano rallado y aceite de oliva virgen extra.

También existe el “pesto rojo siciliano”, que lleva tomates secos, pimientos, queso pecorino y aceite, o el “pesto de Trapani”, también de Sicilia, que en este caso se le añaden tomates, almendras, albahaca y ajo…

Pesto rosso

La palabra italiana “pesto”  es de origen genovés.  “Pestare”   significa “machacar con mortero”.  Curiosamente, aunque el origen de la salsa “pesto” es Genovés, fue en el norte de Italia, en Liguria -ya en el límite con Francia- donde se le añadió albahaca, tan característica de esta salsa, por primera vez, ya que allí crece con facilidad. Desde Génova la receta se extendió a toda Italia y  fueron apareciendo las diversas versiones de esta salsa.

Antes de que existiesen las batidoras, antes de las recetas en internet y la electricidad, la albahaca se machacaba a mano en un mortero. Si tenéis tiempo, la forma tradicional sigue siendo la mejor ¿Por qué? Hay muchas razones. Al picar primero el ajo y la sal, luego los piñones, luego el queso, y finalmente la albahaca, obtenemos un pesto que va ganando en aroma a medida que lo hacemos. Machacar repetidamente las hojas le da al pesto una cremosidad exuberante. Agregando el aceite poco a poco la salsa se emulsiona muy bien.  Es cremoso, delicioso y sabe a la mejor versión de la albahaca.  

Esta salsa casa muy bien con los  tallarines o los espaguetis. También para carne, pescado y verduras. 

Salsa Pesto

Ingredientes

  • 30 gr de hojas de albahaca
  • 1 diente de ajo
  • 2 cucharadas de queso parmesano rallado
  • 30 gr de piñones
  • aceite de oliva virgen extra
  • sal

Preparación

Por supuesto necesitaréis un mortero para hacerlo a la manera tradicional. Lo tendréis preparado en 10 minutos. 

  1. Poned los piñones en una sartén al fuego, sin aceite, y tostadlos hasta que cojan color.
  2. Colocad en el mortero los piñones tostados y el diente de ajo pelado y troceado y picadlo.
  3. Agregad las hojas de albahaca y picadlas también.
  4. Añadid el queso rallado y ponedle una buena cantidad de aceite. Poned una pizca de sal y removed hasta tener una salsa homogénea.

Para que la salsa nos quede más sabrosa el secreto es no triturar los ingredientes en exceso.

¡Recordad que si os sobra hay que guardarlo en la nevera!

 

 

 

 

Salir de la versión móvil