Comer con los dedos

No hay ninguna regla tallada en piedra que nos diga cuando se puede comer con los dedos pero si están el sentido común y normas generalmente aceptadas. La cultura es otro factor a tener en cuenta, ya que lo que es válido en España no lo es en otro país.

En los países árabes, así como en India, China, el Sudeste Asiático y las naciones subsaharianas se mantiene la costumbre de comer con la mano. Los cubiertos pueden encontrarse en restaurantes de categoría o acostumbrados a recibir turistas, pero millones de personas encuentran más práctico, e incluso más higiénico, comer con las manos.

En la cultura árabe se come con la mano derecha, ya que la izquierda se considera ‘impura’, por destinarse a tareas del aseo personal, un concepto similar a la cultura hindú. En unas y otras la higiene de las manos es obligatoria, y queda muy mal vistas las uñas largas.

Lo cierto es que en Europa solo se usan cubiertos desde hace unos tres siglos. Pero aún seguimos comiendo los bocadillos con las manos, los sándwiches, los perritos calientes con extra de ketchup, los pepitos, las pizzas, las tostadas untadas con mantequilla y mermelada…Y en cualquier elegantes restaurante de “alto copete” los comensales cortan trocitos de pan con los dedos y se los van comiendo.

Y ahora está de moda el “finger food” (o alimentos para comer con los dedos como es el caso de los aperitivos: patatas, aceitunas, canapés, tapas,…  si se ponen en el centro de la mesa, están pensados para compartir, y se pueden comer con la mano siempre que sean de un solo bocado y no manchen. Es decir, si vamos a terminar poniéndonos perdidos prevalece el terminar limpio. En el caso del jamón se puede tomar también con los dedos del plato o bandeja donde esté servido.

El pan se trocea con la mano, y se permite que dos dedos se usen como pinza para mojarlo con la salsa. Las aceitunas también se pueden tomar o con los dedos o con un palillo, pero siempre que estén en un platillo en el centro de la mesa. Si forma parte de una ensalada, o se encuentran en tu plato como guarnición, por supuesto que hay que recurrir al tenedor.

Los crustáceos y bivalvos requieren el uso de las manos y también de los cubiertos. En el caso de las ostras, por ejemplo,  necesitaremos un tenedor especial y un par de dedos para ayudarnos a separar el molusco de su caparazón, pero otra alternativa es coger con los dedos  la concha y absorber la ostra con el agua salada. Los mejillones también se separan de la misma forma, pero no queda bien sorberlos como los otros bivalvos. Las langostas suelen venir partidas al medio, mientras que de los cangrejos y centollos se arrancan las articulaciones con las manos y con los cubiertos se extrae la carne. ¡Sálvese quien pueda! Si tenéis dudas esperad a ver que hacen los demás comensales.

En cuanto a las gambas y langostinos sólo en un entorno de mucha confianza se pueden comer con las manos pero nunca se debe sorber la cabeza.

Por lo que respecta a la fruta las frutas del bosque (arándanos, cerezas, fresas, frambuesas, grosellas…) y las uvas se deben comer con los dedos. 

Si te parece interesante el tema consulta el artículo  A mano: degustar con los dedos

Otra cosa es chuparse los dedos. ¡Eso nunca en público!!