Los tomates rellenos de bacon y queso al horno tienen un sabor y una textura estupendos, son fáciles de preparar y resultan muy económicos. Constituyen un primer plato muy elegante. Si los tomates son pequeños pueden convertirse en aperitivo. Servidlos con un arroz blanco o pilaf y tendréis un plato principal.
Se me ha ocurrido prepararlos porque una vecina me ha regalado unos tomates valencianos preciosos, recién cogidos de su huerta. Estaban muy maduros y tenían un aroma muy intenso y atractivo.
Realmente podemos preparar unos tomates rellenos de casi cualquier cosa que se nos ocurra. Los tomates más grandes los podemos rellenar con su misma pulpa, con cebolla, calabacín, espinacas, champiñones y mucho, mucho queso ¡que rico!.
Cuando me he puesto a prepararlos iba a rallar el queso. Unos trozos de queso manchego que siempre tengo en la nevera, aunque queda muy bien la mozzarella, el queso de cabra, el cheddar y ¡no os olvidéis del Parmesano! que le aporta un sabor estupendo. Al final me he decidido a cortarlo en cubos pequeños para notar más el “mordisco” del queso.
Una vez rellenados los tomates, y antes de ponerlos en el horno, si os apetece podéis espolvorear queso rallado por encima o bien una mezcla de queso y pan rallado. Os quedará una cubierta crujiente deliciosa.
Aunque hay que hornearlos, y eso lleva un tiempo, la preparación es bastante rápida y, sobre todo, fácil. Se pueden servir con unos espaguetis con una salsa pesto y entonces ya os puede servir como plato principal. ¡Podría ser incluso ser una buena manera de hacer que los niños coman verduras!
Si os sobre relleno no os preocupéis, podéis utilizarlo para una pizza, por ejemplo.
Tomates rellenos de bacon y queso al horno
Ingredientes
Preparación
Además de ser sabrosos, los tomates resultan coloridos y atractivos en cualquier plato.