Medallones de solomillo de cerdo con salsa a la pimienta

Otra receta en peligro de extinción. Está pidiendo a gritos que la salvemos: los medallones de solomillo de cerdo con salsa de pimienta. Ya sabéis: los “foodies” apuestan por las recetas de la abuela.

Cuando era joven preparaba este plato de medallones de solomillo de cerdo siempre que quería quedar bien, cuando recibía amigos en casa. Ahora le he puesto el “ibérico” al lado del solomillo para ver si aúpo un poco el plato a otra categoría. Lo cierto es que ahora es fácil de encontrar ibérico en el supermercado. Hace 30 o 40 año era muy difícil por no decir imposible.

Esta receta arrasaba en los años 80 y 90.  Es una receta heredera de un plato todavía más antiguo, el filete a la pimienta, traído de París. El filete se rebozaba en pimienta y se freía hasta conseguir una costra crujiente y los jugos que quedaban en la sartén se aprovechaban para  hacer una salsa con un poco de caldo y nata.

En realidad esta receta es realmente una variación, simple y casera, de una de las salsas de pimienta que podéis encontrar en el supermercado. ¡No quiero dar marcas!.   Aunque estas salsas ya preparadas pueden ser ciertamente útiles e un momento dado, si podemos es preferible prepararlas nosotros mismos, agregando nuestro propio toque a las comidas.

La pimienta molida y la pimienta verde en grano son los componentes principales de la salsa.  La pimienta negra molida le da el punto picante al plato.  La suelo usar en cantidades generosas porque me gusta notar el sabor a pimienta pero, si preferís una variación más suave, podéis  sazonarlo a vuestro gusto.

Podéis servirlo con una ensalada o verduras cocidas y algunas patatas fritas o asadas al horno, ¡y listo!

Rápido y fácil de hacer pero lleno de sabor, ideal para una comida especial con amigos o familia.